Sábado 13 de Agosto de 2022
También se quejan de las malas condiciones en el hospital, falta de medicamentos, aparatos y especialistas
Médicos y enfermeros del ISSSTE pararon labores desde este martes, luego de la amenaza de muerte a un médico por parte de un familiar de un paciente internado que llegó hasta el estacionamiento; no se detuvieron los servicios de urgencias y las cirugías de urgencias. Sin embargo, a la amenaza se suman las carencias que hay desde los daños por el sismo del 7 de septiembre de 2021, lo que causó que el paciente internado no pudiera ser intervenido, y la molestia de su familiar, que terminó en la amenaza al médico encargado, a quien esperó en el estacionamiento del nosocomio, según narró otro médico. Por la mañana, en el ISSSTE hubo una reunión de la que se firmó una minuta, donde se informó de la suspensión de algunos servicios debido a las malas condiciones en el hospital, falta de medicamentos, aparatos, así como médicos especialistas, seguridad y limpieza. De acuerdo con la minuta, obtenida por El Sur, luego de una reunión entre el director del hospital, Silvio Rosales Flores, la subdirectora administrativa Liliana Hernández Pinzón, la coordinadora de Recursos Humanos, Jazmín Bernabé Valencia, entre otros directivos y los representantes sindicales, el delegado del SNADETISSSTE y la dirigente de la sección 17 del SNADETISSSTE, Leticia Piza Galeana, se dará continuidad a la atención de los pacientes que ya están internados. En el documento se señala la falta del funcionamiento del aire acondicionado, que afecta los servicios en las áreas de quirófanos, servicio de medicina interna con 25 camas sin poder usarse, el servicio de ginecología. La falta del aire acondicionado también retrasó la programación de las cirugías, además de la falta de dotación de medicamentos y soluciones estériles para el manejo apropiado de los pacientes hospitalizados. Además de que hay consultorios con lavabos e instalaciones inservibles de muchos meses atrás, los elevadores son insuficientes e inoperantes. El servicio de urgencias presenta una saturación de pacientes y hay retraso en la atención de los mismos por el déficit en camas existentes en el área hospitalaria. Selñalan “la deficiencia grave” de los servicios de vigilancia y limpieza, que se presenta de manera intermitente; la inoperante área de patología, también la falta de cobertura de médicos especialistas en temporadas de vacaciones o por incapacidades, que generan la sobrecarga de trabajo del personal que se encuentra laborando en ese momento. Como acuerdo, se suspendieron las cirugías electivas hasta que existan las condiciones para las intervenciones, sólo se atenderán urgencias médicas y quirúrgicas; se suspendieron las actividades de atención de consulta externa y se dará continuidad a la atención a pacientes hospitalizados, asistencia y permanencia de todo el personal de acuerdo con su jornada laboral.
La amenaza al médico
Uno de los médicos que labora en el ISSSTE, narró que la mañana de este martes un médico fue abordado en el estacionamiento por el familiar de un paciente a quien no se puede operar por las malas condiciones del hospital, y las carencias que existen, y lo amenazó de muerte. Este hecho dijo el médico quien por seguridad pidió omitir su nombre, causó que luego de la reunión que hubo con las autoridades decidieron parar labores, “que comprendan los usuarios que también es por su bien”. El doctor dijo que todo se debió a que en el hospital “no hay lo mínimo indispensable para poder realizar una operación” y a pesar de realizar llamados al subdirector médico del ISSSTE, José Luis Morales Alvarado, para que atiendan esta situación que comenzó a agudizarse desde enero, no hay respuesta positiva y sólo promesas, como las que hizo ayer de que se iban a atender la demandas. El médico amenazado le explicó al familiar que no se trataba de negar el quirófano y la operación al paciente, sino que no había las condiciones para realizar la cirugía y que no podía arriesgar su ejercicio profesional. El médico entrevistado indicó que en el hospital no hay analgésicos, antibióticos, y sedantes, lo que también consideró detonó la molestia del derechohabiente. El doctor informó que en el hospital hay 120 pacientes internados, pero hay otras 25 camas menos en medicina interna por no tener las condiciones. Dijo que además no hay reactivos suficientes para la atención, y los refrigeradores no enfrían y las muestras de sangre se coagulan. Recriminó la falta de compromiso del subdirector médico del ISSSTE, porque desde diciembre de 2021 han tenido conversaciones y donde ha prometido que se resolverían los inconvenientes “y bajo esas condiciones hemos decidido a trabajar con alguna carencias, pero ahora ya es inoperante, porque sólo hay una capacidad de atención de un 30 por ciento”. El doctor indicó que apoya la decisión de los jubilados y pensionados además de las organizaciones civiles y derechohabientes de exigir un hospital de tercer nivel más médicos y mejor atención.
Desde hace cuatro años hay señalamientos
Desde hace cuatro años la Comisión intersindical de organizaciones civiles y derechohabientes del ISSSTE exige la construcción de un hospital de tercer nivel para la atención de los derechohabientes, que han denunciado las malas condiciones de atención y falta de médicos especialistas, así como buenas instalaciones y medicamentos. Los integrantes de la Comisión, integrada por 14 sindicatos y 10 organizaciones civiles de jubilados y pensionados, han informado que el hospital del ISSSTE en la avenida Ruiz Cortines fue edificado en 1974, con una capacidad de 80 camas, para atender 18 mil usuarios de ese entonces, pero que en la actualidad sigue igual, pero con 250 mil derechohabientes sólo de Acapulco, y a nivel estatal son 650 mil. Los impulsores de este nuevo hospital de tercer nivel han logrado conseguir un predio de 8 hectáreas en lo que será Ciudad Pedregoso, ubicado a 2.4 kilómetros a la derecha de la carretera Acapulco-Zihuatanejo, ya en el municipio de Coyuca de Benítez, pero colindando con Acapulco. El hospital fue afectado por el sismo del pasado 7 de septiembre de 2021, con la caída de plafones, juntas, revoques y aplanados, sin presentar daños estructurales. También hubo daños en las áreas de terapia intensiva, cuarto de choque, farmacia, archivo, rayos X, comedor y cocina, y para el 28 de septiembre fueron reabiertas.